Al sur de Cancún, oculto entre lagunas verde esmeralda y manglares, se alza uno de los tesoros mejor escondidos del Caribe: Rosewood Mayakoba, un resort de lujo que combina el diseño contemporáneo con la naturaleza más exuberante.
Este destino de ensueño se encuentra vecino al encantador pueblo de Playa del Carmen y destaca por su refinamiento, estilo y calidad. Todo aquí produce una sensación de pureza difícil de describir.
En un entorno donde cielo y mar se funden, la Península de Yucatán alberga un complejo galardonado con los más prestigiosos premios del turismo de lujo, como el Condé Nast Traveler’s Gold List y el Andrew Harper’s Hideaway Report Best in the World.
El complejo, situado a lo largo de una milla de arena blanca en forma de media luna, parece hecho de la misma materia que los sueños. Un concepto donde la serenidad, la belleza y la armonía subliman el privilegiado entorno natural: una selva tropical prácticamente virgen donde perderse de las preocupaciones cotidianas.
El resort Rosewood Makayoba se compone de 128 suites espaciosas y exquistamente decoradas con infinity pool, piscinas privadas y terrazas con unas vistas que calman el espíritu.
Y después de alimentar el alma, podemos alimentar el cuerpo con una variada oferta gastronómica sin salir de nuestro pequeño paraíso. Casa del Lago ofrece exquisita cocina internacional. En Punta Bonita se sirven especialidades mexicanas a sólo unos pasos de la playa. Y si lo que queremos es cuidarnos, debemos acudir al restaurante del spa Itzamná, especializado en platos saludables.
Ya entrada la noche, el Agave azul nos ofrece ceviche fresco y tequila bajo las estrellas.
En la playa de Mayakobá podemos practicar actividades naúticas como buceo y snorkle. El resort también ofrece pesca, paseos a caballo y campo de golf.
¿No os parece un broche de oro para esta Semana Santa? Feliz domingo, estéis donde estéis.
©Fotos: Rosewood Hotels & Resorts