Hace ahora un año os contábamos en este blog que Moynat resurgió de sus cenizas tras 35 años de letargo tras ser adquirida por el grupo LVMH. Y hay que reconocer que la multinacional de productos de lujo no pudo estar más acertada. Desde 2011 la firma francesa de más de 150 años no sólo ha recobrado la posición que le pertenece, sino también el prestigio.
Una buena muestra de ello son los dos premios que acaba de recibir: World’s Best luggage Brand (Mejor Marca de Maletas del Mundo) de los Luxury travel awards 2013, y la Mejor Creación Artesanal en los BORN exceptional creation awards.
Los Luxury travel awards son entregados cada año por el Shanghai Traveler’s club, compuesto por 3.400 miembros, todos ellos de clase acomodada y que acostumbran a viajar al extranjero. Su labor es la de elegir los mejores hoteles del mundo, las mejores agencias de viajes, destinos y experiencias, todos ellos alrededor del mundo del lujo. En su última edición, que tuvo lugar el 28 de enero, la maison Moynat fue galardonada con el premio a la Mejor Marca de Lujo.
Pero este no ha sido el único premio que la firma francesa ha recibido en las últimas semanas. Una actualización de su mítica maleta Limousine Attaché Case con base cóncava acaba de recibir el reconocimiento a la Best Craftsmanship Creation (Mejor Creación Artesanal), que se entrega cada año en los Born Creation Awards.
La idea de este original baúl en realidad tiene más de 100 años, pues fue la fundadora de la marca, Pauline Moynat, la que la ideó en 1902 pensando en los automóviles que tenían el techo curvo. Y es que, si algo caracterizó a la maison desde su nacimiento en 1849 fue su capacidad para adaptarse a los tiempos, a las necesidades y gustos de los viajeros de su época. Una funcionalidad siempre acompañada del indiscutible savoir-faire que ha ido de su mano desde entonces y que ha renacido con la marca.
Un siglo después, las curvas de la Limousine Attaché Case se han actualizado y han sabido soportar decenios de modas cambiantes. Aunque hoy en día su funcionalidad se ha transformado en encanto, un encanto con mucho que ofrecer: un elegante y resistente cuero, un gran espacio y una cerradura Moynat patentada con teclas numéricas que mantendrán a salvo sus pertenencias.
Puede que ya no veamos maletas de este tipo –ni de ninguno- encima de nuestros automóviles, pero seguro que nos cruzamos con unos cuentos nostálgicos viajeros que nunca emprenderían su travesía con una Moynat como compañera.
© Fotos: Moynat